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sábado, 30 de agosto de 2014

¿Cuál fue el legado de Alberdi para la Argentina? (*)





Estoy muy contento de estar aquí, no solo porque tengo la oportunidad de exponer ante tantos amigos que aprecio, sino porque lo hago con motivo de honrar a Juan Bautista Alberdi. 


Alberdi, padre de nuestra constitución, una constitución liberal, es solo comparable con próceres de la altura de Thomas Jefferson en Estados Unidos.



Hoy en día todos hablamos de constitucionalismo, pero somos pocos los que en verdad hemos leído y estudiado la constitución. 

Una constitución que limita al gobierno y les da libertad y poder a los individuos.

Pero, en mi condición de estudiante universitario, quiero darle a estas palabras un sentido y una reflexión que nos atañe a todos los argentinos en cuanto hace a la educación y la visión que tienen los futuros dirigentes acerca de nuestra historia.

En este sentido, y sabiendo que hoy iba a tener el honor de compartir con ustedes estos minutos, en las últimas dos semanas me tome el pequeño trabajo de hacer, en las clases que frecuento, una mini encuesta. Por supuesto, aclaro desde ya que no tiene ni remotamente la rigurosidad que saben darle quienes se dedican a esta tarea. Lo mío es simplemente una muestra muy reducida y tal vez no científica del panorama que nos encontramos en los claustros de nuestro país. El tema fue la simple pregunta, ¿Conoces a Juan B. Alberdi? ¿Cuál ha sido su obra y su legado? Entrevistados veinte compañeros de distintas clases, 15 de ellos desconocían totalmente al ilustre tucumano. De los 5 restantes, 3 tenían una idea más o menos acertada acerca de la vida y la obra de Alberdi, mientras que los 2 últimos “aprobaron” satisfactoriamente la requisitoria.

¿Qué primera conclusión nos deja esta experiencia? Que la tarea que nos debemos en la Argentina es monumental. Si todos sabemos que hoy nos debatimos en un interminable circulo de inseguridad, inflación, estatismo desenfrenado, déficits y defaults, la más grande tarea que tenemos por delante es restablecer los verdaderos valores republicanos, es decir, los valores alberdianos.

Hoy, 160 años después hemos dado un giro de 180° y hacemos todo lo contrario a lo que dice esa constitución. Ciertamente, este cambio tan pronunciado no empezó ahora, pero la verdad es que en los últimos tiempos el sentimiento de decadencia es notable.

El gobierno se mete en el comercio, el gobierno provee salud, el gobierno brinda pensiones, el gobierno saca el petróleo, administra los ferrocarriles, transmite el fútbol, hace encuestas de rating televisivo, ordena la grilla de la TV paga, gasta millones en subsidios sin sentido y sin control, y asfixia a los que producimos con una carga impositiva nunca vista. Todo, absolutamente todo, muy lejos del espíritu y la letra de la constitución alberdiana de 1853. Ya sabemos que  casi el único rol que en verdad debería cumplir, que es el de legislar, juzgar y administrar un reducido estado público, lo hace de una forma totalmente corrupta, llena de amiguismos y privilegios.


Hemos violado la constitución con varias reformas, que no hicieron otra cosa que agrandar la omnipotencia del estado por sobre las libertades de los individuos. Alberdi, que deseaba casi ilimitadas y abundantísimas libertades civiles, entre las que están las libertades económicas de adquirir, enajenar, trabajar, navegar, comerciar, transitar y ejercer toda industria licita, jamás hubiera aprobado ni consentido ni una fracción del engendro en el que nos encontramos hoy. Lo explicó muy bien, por otra parte, en su Sistema Rentístico de la Confederación Argentina.


Amigos: la constitución es la ley suprema, es el primer bastión de nuestras libertades, y de ninguna manera puede ser contradecida, puesto que la constitución da garantías de que sus leyes orgánicas no serán excepciones derogatorias de los grandes principios consagrados por ella, como se ha visto más de una vez. Es preciso que el derecho  administrativo no sea un medio falaz de eliminar o escamotear las libertades y garantías constitucionales. Por ejemplo: la prensa el libre, dice la constitución; pero puede aparecer una “ley de medios” y crear tantas trabas y limitaciones al ejercicio de esa libertad, que la deje ilusoria y mentirosa. También el comercio es libre, dice la constitución; pero viene el fisco con sus reglamentos, ordenanzas, estatutos, legislaciones y todo tipo de trabas que lo tornan ilusorio.  En palabras del mismo prócer, “Gobernar poco, intervenir menos, dejar hacer lo más, no hacer sentir la autoridad”, “La riqueza de las naciones es obra de las naciones, no de sus gobiernos”. Yo diría entonces, se progresa no por el gobierno, sino a pesar del gobierno. En el caso de la libertad de trabajo, las leyes de salarios mínimos o estabilidad de los empleados públicos son ejemplos de lo que no debiera hacerse. Ya lo dijo también Alberdi que “garantizar trabajo a cada obrero sería tan impracticable como asegurar a todo vendedor un comprador, a todo abogado un cliente, a todo cómico un auditorio”. La ley que tuviese ese poder, bien dice el prócer, solo podría tener ese poder a expensas de la libertad y de la propiedad. Pues esa es, precisamente, nuestra situación hoy. Finalmente, el estatismo exorbitante que hoy tenemos es claramente inconstitucional, antialberdiano. Este lo señala cuando expresa que “la constitución ha impuesto al Estado la obligación de no intervenir por leyes ni decretos restrictivos en el ejercicio de la producción o industria comercial y marítima”.




Hoy estamos aquí conmemorando a Juan Bautista Alberdi. Aunque me parece excelente esta iniciativa, creo que sería mejor que dejemos de conmemorarlo un solo día y volvamos a evocarlo todos los días defendiendo la constitución contra los que la franquean, trasponen, cruzan y la esquivan.

Y he aquí, entonces, el verdadero legado de Juan Bautista Alberdi, por sobre su extensísima y variada obra: debemos luchar incansablemente para que en nuestro país vuelva a regir el estado de derecho, que decir “ser argentinos” pueda expresarse con el orgullo de quienes sabemos que nos espera un futuro de grandeza y no la declinación que nos embraga desde hace ya demasiado tiempo.

Muchas gracias.


(*) Charla brindada en el evento LibreMente en honor a Juan Bautista Alberdi, en la ciudad de Mar del Plata, el día 29 de agosto de 2014.




lunes, 17 de junio de 2013

El pasivo del MAMDIS

¿Es el kirchnerismo el peor administrador de la cosa pública de la historia argentina? Se podría decir, rotundamente, que sí. Todo el tiempo escuchamos frases autorreferenciales que hacen alabanzas a Néstor Kirchner por el supuesto “pago de la deuda”. Pero puede que sea la falacia más grande del gobierno kirchnerista.

Veamos. Nunca en la historia de Argentina se ha recaudado más que en estos últimos diez años de gobierno. Un estado que avanza sobre la libertades individuales, expropiando y confiscando sin límite alguno. Sin embargo el país tiene miles de deudas…

Nos estamos refiriendo a las deudas por juicios entablados contra el país, que van desde casos nacionales hasta internacionales, de particulares hasta colosos empresariales.

Para darnos una idea de que monto estamos hablando, se puede tomar como referencia que las reservas del Banco Central son de unos casi US$ 39.000 millones. Y los reclamos a los que me refiero llegan a unos 77.000.000.000 de dólares, es decir mucho más que todas esas reservas. Y esto haciendo abstracción de que, de ninguna manera, los gobiernos pueden usar fondos de un órgano independiente, como un banco central, para pagar deuda pública. En este sentido, ya sabemos que los fondos de los bancos centrales son los activos que respaldan el pasivo de la base monetaria. En otras palabras, es el respaldo que tiene una moneda ante la confianza (o desconfianza) de la gente.

Y bien, estas cifras son demostrativas del coloso pasivo que está dejando la supuesta “década ganada” del kirchnerismo. Más claro aún: un país, virtualmente, fundido.

LOS JUICIOS Y DEUDAS

Analicemos brevemente los juicios que está afrontando la Argentina: son innumerables.

Estados Unidos,  Europa  y los mismos argentinos le hacen juicios a un gobierno que se extralimitó y avasalló todas las reglas de juego, tanto privadas como públicas, es decir verdaderos atropellos que pulverizaron la seguridad jurídica de la nación.

Dentro de los casos más relevantes se encuentran, en cifras aproximadas y agrupando según el tipo de deuda:

En tribunales internacionales:
  • Los jugosos US$ 11.177 millones de bonistas que no entraron a los leoninos canjes. Ciertamente, están muy bien defendidos por el juez Thomas P. Griesa, de la Corte del Distrito Sur de New York. Pueden llegar a ser unos US$ 20.000 si se le suman los intereses caídos.
  • US$ 9000 millones en deuda de la Argentina al Club de París.
  • Tramitados en  el CIADI (Centro Internacional de Arreglos de Diferencias relativas a Inversiones), con sede en Washington:
        • US$ 8.000 millones del juicio de Repsol por la confiscación de YPF.
        • US$ 1.560 millones del juicio de Marsans por la estatización de  Aerolíneas Argentinas.
        • US$ 400 millones de otras demandas internacionales menores.
 En el orden local:
  • US$ 23.600 millones de los fondos que administraban las AFJP que, si bien eran de propiedad de los aportantes (futuros jubilados), fueron confiscados sin compensación alguna. Es claramente, un pasivo contingente que se producirá en función de reclamos judiciales.
  • US$ 10.100 millones en demandas previsionales, de jubilados que exigen reajustes en sus haberes.
  • Juicios por accidentes en transporte público. El caso más conocido es el de las víctimas de la "Tragedia de Once",  donde el costo más grande fue la incalculable pérdida de 51 vidas y los más de 700 heridos que quedaron. Se calcula unos US$ 500 millones que el estado deberá pagar de indemnizaciones.
  • Unos US$ 400 millones de juicios de empresas mineras.
  • US$ 2000 millones, asignados en el presupuesto 2013 a pagarle a Venezuela.
  • US$ 1800 millones a PdVsa por deudas de compra de fueloil.

Thomas P. Griesa
¿Cómo es que, prácticamente, no se hable de todas estas multimillonarias deudas, en un país donde el día a día es una montaña rusa de noticias, los juicios son como fantasmas que nadie ve ni escucha salvo los propios perjudicados, a los que el gobierno responde con oídos sordos? ¿Ejemplos? A los jubilados les alargan los juicios esperando que mueran antes de llegar a un acuerdo o la aplicación de las sentencias. A los españoles de Repsol se les ríen en la cara intentando imponerles una suma mucho menor a la que deberían pagarles (y, sin embargo, no les pagan nada). A los bonistas estadounidenses que alguna vez depositaron su confianza en la Argentina les dicen, despectivamente, “fondos buitres”. Mientras tanto, todas las empresas estatales son deficitarias, la única manera de hacerle frente es mediante la coerción vía impuestos a un nivel nunca visto en el país, impuestos que el gobierno despilfarra en planes sociales y subsidios a empresas amigas.

¿Quién se va hacer responsable de estas deudas millonarias? El kirchnerismo seguro que no. ¿Quién es el que va a tomar la posta en 2015 y con qué escenario se va a encontrar? El silencio es casi total. De esto no se habla. Como vemos, el pasivo contingente es, sencillamente, enorme.

Digámoslo con todas las letras: el kirchnerismo está dejando un país en ruinas desde todos los puntos por donde se lo mire. Han hecho una estafa monumental a la ciudadanía argentina. Pero, como dice el refrán popular "no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista": en algún momento la era kirchnerista va a terminar y lamentablemente los que va a terminar pagando esta fiesta de estatismo son las futuras generaciones que nada tuvieron que ver con esto. Un gobierno que se jacta tanto de una “década ganada”, pero que al fin y al cabo está dejando una herida que ya comienza a ser la gran infección con una dolorosa verdad. Y esto sin dejar de tener en cuenta que el famoso “modelo acumulación con matriz diversificada e inclusión social” (Mamdis) tiene los días contados.

Algunas fuentes: Mecon, Ciadi, Anses, BCRA citadas por el diario La Nación

sábado, 14 de julio de 2012

Educación “pública”, ¿Estafa o Verdad? (*)

«Nunca permití que la escuela interfiriera en mi educación»
Mark Twain

Es muy difícil realizar un trabajo sobre la “educación pública”, más que nada en el país en que vivimos donde es una “política de estado” ya instalada en la vida y en el pensamiento de los ciudadanos y todos lo toman como algo que siempre estuvo en nuestro país y que así debe ser. Es más, mucha gente toma la educación pública como “un derecho innegable”. Pues bien, en el siguiente trabajo investigativo de nuestra a autoría, daremos una breve reseña de la educación estatal, a través de temas tabúes como el de la falacia de lo “publico”, lo que en verdad generan los paros docentes, en que se basan los salarios docentes y como mejorarlos, hasta puntos más experimentales como, entre otros, el de los vouchers o créditos educativos y el home schooling.

La falacia Público vs. Privado
En nuestro país, al igual que en muchos otros, se utiliza la definición de Educación Pública para hacer referencia a la educación propiciada por el gobierno... pero acaso la educación privada ¿no es también para el público? En líneas generales, ¿no es acaso una educación sin más barreras que las generales a cualquier servicio privado? Por lo tanto, podemos afirmar que se trata en realidad de un juego de palabras, una trampa, formulada por los gobiernos para tapar lo que realmente esconde: que se trata de "educación estatal" gestionada privadamente.

¿Que significa educación privada en la Argentina?
En pocas palabras, implica que el dueño o la comisión de padres del estableciendo “privado” se dedican a temas tales como elegir el color del uniforme de los chicos, o el horario de las actividades extracurriculares, lo que, claramente, es ¡totalmente irrelevante en cuanto a la educación estrictamente considerada! Porque lo que de verdad importa es saber que se esta proveyendo en las escuelas: se brinda educación, bibliografías, textos... Ahora bien, ¿quién fija los temas curriculares en estos establecimientos privados? ¡El ciudadano que sea Ministro de Educación! En este orden, si nos preguntamos cual es una de las entidades más diabólicas e ineficientes que despilfarra dinero de los contribuyentes, automáticamente debemos responder: El Ministerio de Educación. Veamos el punto desde este aspecto: el hombre titular de ese puesto (es decir, el Ministro de Educación) un día antes de ser nombrado en el cargo es un mortal al igual que todos los demás (por lo tanto, sin poder de decisión en absoluto sobre los contenidos educativos) pero cuando asume como tal se transforma en una especie de iluminado que no solo se encarga de administrar la educación de sus hijos, sino también la de 40 millones de personas más. ¿Se puede ser tan inmoral? La educación es un proceso por naturaleza de prueba y error, no es algo tipo A más B igual C. Llegando a una de las primeras soluciones, proponemos desregular totalmente a los colegios privados, dejándolos experimentar distintos modos educativos, que se adapten a las necesidades de cada chico. Así, algunos optarán por escuelas con orientación a las ciencias, otros a la música, otros a las técnicas, etc.

¿Existe algo más socialista que la educación estatal? Cualquier empresa estatal que tomemos como ejemplo, ya sabemos que produce artículos de mala calidad a muy altos costos, con privilegios especiales para un grupo reducido[1], estando siempre en déficit y dejando a espaldas de los contribuyentes las deudas. Entonces, ¿por que seguimos permitiendo dejar en manos del gobierno la educación de los chicos?

Haciendo una digresión, ¿se imaginan si el gobierno fuese el encargado de distribuir los alimentos? Las consecuencias serían catastróficas y nadie tendría para comer. Pues lo mismo esta pasando con la educación. Tomemos por caso una maestra en el sector estatal. Digamos que argumenta estar "muy agradecida" por su trabajo para-estatal, y que sin este trabajo ella no podría darle de comer, ni vestir a sus hijos… Es claro lo siguiente: ¡Lo que esta docente no esta viendo es algo que se llama Costo de Oportunidad! ¿Qué significa esto? Significa que en realidad el gobierno no esta creando el empleo de esta maestra, sino que se le esta sacando la oportunidad a los verdaderos emprendedores que son los privados, de crear escuelas y darle trabajo y salario a esta mujer.
Algo a destacar es que esta mujer trabaja doble turno, sale a las 7 de la mañana y vuelve a las 5:30 de la tarde a su casa. Por el simple hecho que trabajando con un solo turno no le alcanza el dinero para “llegar a fin de mes”. ¿De que depende el sueldo de esta maestra? Su sueldo, como el de cualquier trabajador, depende entera y exclusivamente de la tasa de capitalización.

¿Que quiere decir esto de la "tasa de capitalización? Podemos asimilarlo a la cantidad de maquinarias o la cantidad de herramientas aplicadas a esa producción que están demandando los consumidores; cuando esa cantidad per cápita aumenta, aumentan los salarios e ingresos en términos reales de las personas[2]... Un ejemplo clarísimo es el de un jardinero de Buenos Aires - Argentina que se muda a Los Ángeles, California, USA y, automáticamente, pasa a ganar no menos de 8 veces más, con las mismas tijeras, la misma bordeadora, las mismas virtudes y los mismos defectos. En este caso, podemos estar en una disyuntiva en pensar si el porteño es más amarrete o si el californiano es más generoso... Pues bien, lo relevante está dado en que el californiano esta obligado a pagarle el salario mas alto, porque ¡la tasa de capitalización se lo exige, la competencia interlaboral así lo determina! Y son los marcos institucionales, el respecto a los derechos de propiedad lo que va a permitir que aumente la tasa de capitalización[3].


Volviendo al tema docente en nuestro país, ¿qué sucede con las famosas negociaciones de principio de año escolar, cuando los maestros reclaman un aumento de sueldo a través de las paritarias? Lo primero que encontramos es una gran injusticia hacia los que menos tienen en la sociedad, dado que se les sacan coercitivamente de los impuestos para pagarles a otros, en este caso a los docentes. Segundo, dado que las escuelas no provocan ganancias monetarias, el gobierno solo puede pagarles mediante lo que recolecta con los impuestos, y como todos los gobiernos invariablemente gastan más que lo que recaudan, les paga a los maestros, policías, médicos y a todo empleado estatal con déficit, lo que provoca inflación, haciendo que ese aumento sea finalmente ficticio.


El Homeschooling
Una alternativa a la forma que hoy en día impera en el mundo frente a mandar a los chicos a los establecimientos escolares es la modalidad de estudiar en casa o el homeschooling. Es un sistema no tan conocido en nuestro país, pero que va en alza, obviamente impulsado por los mismos padres de los niños que están en desacuerdo con las instituciones tradicionales.

Como el nombre lo indica, los chicos estudian en su casa de la manera que los padres decidan. En el caso de nuestro país, los chicos siguen, claro, el mismo programa de contenidos dado por el Ministerio de Educación en sus casas y a fin de año rinden exámenes en una escuela estatal o privada del año que le corresponda, en la modalidad de alumno libre.

Este sistema nos parece muy avanzado en el sentido que resguarda la libertad de los padres en decidir si quieren mandar o no a sus hijos a una escuela. Por supuesto que siempre va a haber gente que se mete en la vida de los demás, gente antiprogreso, gente paternalista. Como tal vez sea el caso de Ana Caraballo, psicopedagoga de la consultora Caraballo & Segat, citada en el diario La Nación, que implementa un programa de coaching estudiantil y afirma: "la escuela en casa impide la posibilidad de compartir con pares diferentes momentos y actividades, competir y, entre otras cosas, aprender a convivir con las diferencias"[4].

Sin embargo, ejemplos explícitos de chicos estudiantes hoy en día en sus casas, afirman todo lo contrario. Como es el caso de Felipe Fraile, citado en la misma nota, un niño que estudia en su casa y comenta: "La ventaja de estudiar de esta forma es que tengo tiempo libre para hacer lo que me gusta, como tocar el piano. Hace poco también pinté una parte de la casa, cosa que no haría si tuviera que ir a la escuela. Estar ocho horas encerrado en un colegio es muchísimo". Aparte comenta que amigos no le faltan debido a sus actividades "extracurriculares"[5].

Finalmente, en la misma nota mencionada, Constanza Mazzina, investigadora de Eseade y coordinadora del área educativa de la Fundación Libertad y Progreso, considera que la educación en la casa es una opción interesante "en un marco que desmonopolice y desregule la oferta escolar y permita la verdadera competencia entre sistemas educativos"[6].

Una interesante conclusión es que se trata de una respuesta a “la falta de respeto del Estado a la libertad de los padres en educar a los hijos en libertad, según sus convicciones, y la pésima formación y retribución que reciben los docentes por su trabajo. Si los gobiernos insisten en formar “cuadros” con su ideología, avasallar la educación de gestión privada obligándola a dictar materias y contenidos ajenos a sus principios, si destruyen la estatal con malos sueldos y peores evaluaciones, las familias cada vez más intentaran resguardar a sus hijos de la estandarización”[7].

Dato: si bien en nuestro país son raras excepciones las familias que eligen este método, por lo cual no se tienen estadísticas oficiales, sí existen en Estados Unidos, donde hay por lo menos dos millones de chicos estudiando desde sus casas.[8]



«Entregar la educación de nuestros hijos al Estado, es como entregar un rebaño
 de ovejas al cuidado de un lobo»
 Norberto Carca


La solución
En nuestro carácter de Libertarios, siempre estamos en defensa del individuo. Esto quiere decir que defendemos los derechos individuales de las personas (el derecho a la vida, el derecho a la libertad, el derecho a la propiedad, el derecho a la búsqueda de la propia felicidad) [9], y estamos a favor de la competencia, de los impuestos bajos y de un Estado limitado.

En este marco, ¿cuál sería nuestra solución a la escuela estatal? Obviamente lo ideal sería que dejasen de existir las escuelas estatales y solo hubiese escuelas privadas que compitan entre si por los alumnos, en un proceso de prueba y error, dejando a los padres decidir que establecimiento es el indicado para sus hijos. Pero en un país donde el gobierno esta tan entrometido en los más variados temas y la educación esta tan prostituida, sería algo imposible en el corto plazo. Así que proponemos una serie de medidas simples que darían un buen resultado y en un futuro llegar al nirvana planteado al principio.

El primer paso sería, antes que nada, que las escuelas que son privadas hoy en día se puedan llamar realmente privadas. Para esto la primera solución es cerrar el Ministerio de Educación, ahorrándole al gobierno un gran gastadero de dinero; y dejar que cada escuela elija los programas educativos que quiera dar, los libros, los textos, la cantidad de materias por año, las cantidades de año que necesita cada chico para graduarse. En resumen, LIBERAR LA CATEDRA.

En segundo término, los capitales privados al ver que la educación es desregulada y rentable se dedicarían también a este negocio. Y si hemos entendido algo en nuestros estudios, paradójicamente, sobre oferta y demanda, debemos recordar que cuando la demanda sube (en este caso la de escuelas), los precios tienden a bajar. En otras palabras, cada vez más gente podría acceder a la educación privada. Obviamente, este proceso también generará una sana y productiva competencia entre institutos educativos, generando un menú cada vez más diversificado de opciones elegibles. Debe hacerse hincapié en que, así como es positivo y deseable que haya competencia, por ejemplo, en el comercio de bienes, también lo debe haber en el de servicios educativos.

Un tercer punto es bajar decididamente la carga impositiva. Es claro que muchos problemas se resolverían con esta medida, no sólo el de la educación. Este aspecto lo podemos visualizar claramente si pensamos, por caso, en la gente de ingresos más bajos, porque, como dijimos antes, les quitan coercitivamente mediante impuestos parte de su salario para financiar la educación de toda la comunidad (o país), lo que incluye, obviamente, niños también de familias más pudientes. Es decir, hay un direccionamiento o subsidio implícito de quienes menos tienen hacia quienes más tienen. Personalmente, nosotros estamos en contra de cualquier tipo de subsidio, pero resulta a todas luces insólito que el flujo monetario vaya de los más necesitados hacia los menos necesitados. ¡Esta absurda paradoja es el resultado final de la intervención del estado en la educación! Un disparate igual al que sucede en otros ámbitos de la economía.

Un error gravísimo de la mayoría de los países del mundo, incluida, claro, la Argentina, es que los gobiernos subsidian la oferta (llegando al 100% en el caso de las escuelas estatales) en vez de, eventualmente y con más lógica, subsidiar la demanda... Ahí es donde entran los famosos, o no tan famosos, sistemas de vouchers o créditos educativos. Un posible método sería que a cada familia se le entregara un voucher equivalente a cierta cantidad de dinero, para que la familia eligiera libremente en que escuela se va a educar su hijo.
Claro esta que estos vouchers no deberían ser un despilfarro de dinero de los contribuyentes. El alumno se debe esforzar para mantener este privilegiado cheque que le da el Estado y no desperdiciar esta oportunidad única. Esto crea madurez en la persona.
Por supuesto esta alternativa nos parece mucho más moral que la ya vigente en la que se les da educación a los chicos que de verdad se esmeran… ¡al igual que a los que le tienen sin cuidado su educación!

Estamos seguro que en un sistema de escuelas privadas liberadas y en una sociedad con impuestos bajos, estos vouchers, finalmente, no se van a necesitar, Pero, para atender casos puntuales, se podría ver una manera de aceitar el proceso y conceder vouchers periódicamente.

¿Es posible tener un país con escuelas solamente privadas? ¡SI! ¡¡¡Claro que si!!! De hecho en Argentina antes de que Sarmiento, con las mejores intenciones, llevara a cabo su proyecto de educación estatal, trayendo incluso maestras de Estados Unidos, ya había una considerable cantidad de escuelas privadas, que fueron finalmente decayendo frente al nuevo sistema del expresidente. Veamos lo siguiente, con información más que interesante y prácticamente desconocida para el público en general: “Durante la época colonial, la principal oferta educativa de Buenos Aires estuvo en manos de escuelas particulares, laicas o conventuales, que respondían a la demanda de educación generada por parte de hijos de burócratas, comerciantes, ganaderos, artesanos y militares. Los establecimientos eran variados: algunas escuelas eran de mediana dimensión, otras pequeñas, que podían limitarse a la habitación de una casa. Muchas de las instituciones seglares eran regenteadas por mujeres, que en general brindaban una educación rudimentaria, y cuyo alumnado era es su mayoría mixto. Desde mediados del siglo XVIII el consumo de la educación iba en aumento en toda Hispanoamérica, debido al crecimiento económico que se produjo en buena parte del continente. En 1773 un procurador encargado de presentar un censo de enseñanza en Buenos Aires informaba que existían numerosas escuelas particulares; su opinión fue confirmada en 1797 por otro funcionario, quien indicaba que esas escuelas estaban pobladas de niños”[10].

Finalmente, resumamos en que la idea de una educación totalmente privada no es para nada descabellada, sólo falta abrir los pensamientos al debate…


“En realidad hay solo una solución: el estado, el gobierno, las leyes no deben ocuparse
 de los colegios ni de la educación. Los fondos públicos no deben ser utilizados para 
esos fines. La crianza y la instrucción de la juventud debe dejarse enteramente 
en manos de los padres y de las asociaciones
 e instituciones privadas”
Ludwig von Mises, 
Citado por Alberto Benegas Lynch (h)[11]

Apéndice de lo que no debe ser…
Algunas frases que señalan que lejos estamos aún en Latino América de la libertad educativa…



“Decenas de miles de estudiantes chilenos protagonizaron ayer en la capital del país la más multitudinaria marcha en lo que va del año, en reclamo de educación pública, gratuita y de calidad
Santiago de Chile, junio de 2012


Prohíben dictar religión, música e inglés en primaria en horario académico.”
Ministerio del Poder Popular para la Educación. Municipio de Baruta, Miranda, Venezuela.


“A partir del 2013 los alumnos de primer grado no podrán repetir el año.”
Anuncio del ministro argentino del área, Alberto Sileoni


"Educación publica y gratuita siempre"
Franja Morada (agrupación política universitaria argentina, afín a la Unión Cívica Radical)


Provincia de Jujuy, sólo 50 días de clase en todo el año 1998. Por decreto
del gobernador, se promovió de grado automáticamente a todos 
los alumnos.


“Buscan que tampoco se repita segundo grado en escuelas bonaerenses”
Propuesta de la ministra de Educación Silvina Gvirtz.


Los alumnos ya no repetirán el primer grado de la escuela sino 
que promocionarán directamente.
Acuerdo de todos los ministros de Educación de Argentina.


“En el sistema público [en referencia a la universidad] tiene que haber gratuidad
Camila Vallejo Dowling. Militante chilena del partido comunista.



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[1] http://www.elcato.org/la-privatizacion-de-la-educacion
[2] Alberto Benegas Lynch (h) Seminario Universidad El Cato-Fundación Libertad. Abril de 2011.
[3] Ibídem.
[4] Educarse sin ir al a escuela, ¿es posible? Silvia Premat. Diario La Nación. Sociedad. Domingo 10/06/2012.
[5]Ibídem.
[6] Ibídem.
[7] La Culpa es del Estado. Carlos Camean Ariza. Diario La Nación. Opinión. Domingo 10/06/2012
[8] Un fenómeno creciente en EE.UU. Dos millones de chicos no asisten a la escuela. Silvia Pisani. Diario La Nación. Domingo 10/06/2012
[9] Derechos individuales según Armando Ribas en el programa de televisión “Cala”, de Ismael Cala, trasmitido por CNN en Español el mes de enero de 2012.
[10] Carlos Newland. BUENOS AIRES NO ES PAMPA: La educación elemental porteña 1820-1860. Grupo editor Latinoamericano Colección Estudios Políticos y Sociales. Páginas 59/60.
[11] http://www.elcato.org/educacion-y-des-educacion
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* Este trabajo fue originalmente presentado en la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad y resultó ganador de una beca para participar del IV Congreso Internacional “La Escuela Austríaca en el Siglo XXI”

domingo, 8 de julio de 2012

Harto... HARTO de Argentina


No iba a escribir nada sobre este día, pero despues de ver a Valeria Lynch cantar en su vestido ajustado (¿cuanto le habrán pagado a esta artista Nac&Pop?) el Himno Nacional y entonar las palabras "libertad, libertad, libertad" con tanta energía me di cuenta que hay que cambiarlas por "esclavitud, esclavitud, esclavitud", dado que cada vez los argentinos tenemos menos y menos libertad y más y más esclavitud.

Soy esclavo cada vez que...

-el gobierno piensa que es mi papá.
-el gobierno piensa que me gusta el football y lo compra con mi plata para que lo vean los demás.
-el gobierno no me deja comprar divisas para protegerme de la inflación que ellos crean.
-el gobierno no me deja comprar cosas importadas.
-el gobierno me mata con los casi 100 impuestos que me obliga a pagarle.
-el gobierno me controla de donde saco el dinero que gano.
-el gobierno me dice que sustancias puedo o no meter en mi cuerpo.
-el gobierno me dice a que edad (los 18 super poderosos) puedo tomar alcohol, fumar o conducir.
-el gobierno me dice que cosas debo estudiar en la escuela.
-el gobierno me obliga a pagar su fiestita.
-el gobierno me obliga a informarle a que país voy, cuando salgo, cuando vuelvo y que voy a hacer en el exterior.
-el gobierno me da permiso para abrir mi propio negocio.
-el gobierno me dice cuanto le tengo que pagar como mínimo a mis empleados.
-el gobierno me pone un numero (DNI) cual res de ganado.
-el gobierno me exprime y me exprime durante medio año para su subsistencia.
-el gobierno me miente en la cara.
-el gobierno me obliga a comprar termos Lumigarco.
-el gobierno cria vagos con mi dinero.
-el gobierno me dice que me calle por que no soy del 54%.
-el gobierno me obliga a pensar de una única forma con respecto a hechos del pasado.
-el gobierno me oblige a comprar tecnología de porqueria "made in proteccionismo" cuando Boudou tiene su iPhone y su iMac.
-el gobierno me obliga a comprar relojes berretas, mientras ellos lucen costosos Rolex.
-el gobierno me oblige a declarar las cosas que soy dueño.
-el gobierno me obliga a pagar el déficit de sus "empresas".

Tan solo por mencionar algunas de las tantas cosas que me esclavizan hoy en día...

Hace 200 años hombres valiente y honorables nos independizaron de España, luego hombres cultos hicieron de Argentina el primero mundo, haciendo que mis bisabuelos eligiesen este pais para criar a sus hijos. Hoy, 200 años después, hombres cobardes y sin honor destruyen este país, creando en mi amargura y cero ganas de elegir este país para criar a mis hijos...

Harto... HARTO de Argentina.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Infierno para todos

Toda mi vida me dijeron que un terrorista era alguien que ejerce terror sobre las personas, para  hacerlas entrar en pánico. Los métodos usualmente empleados por los terroristas son los asesinatos, las bombas, los secuestros, etc.

El caso mas famoso, por lo menos de los últimos 15 años, de terrorismo es el de Osama Bin Laden. Estaba acusado de incontables crímenes, entre los cuales se encontraba la destrucción de las torres gemelas en EEUU.  Las atrocidades que este individuo cometió hizo que un país se obsesionase con él y lo buscara hasta el cansancio, desatando invasiones a 2 países, e incluso limitando las libertades individuales de las personas en EEUU. Finalmente, en 2011 lo mataron, luego de mas de 10 años de persecución.

Pues bien, Bin Laden es lo primero que se me ocurre cuando nombran la palabra “terrorista”. Pero parece que en Argentina tienen una visión muy diferente a lo que significa ser un terrorista…

Hoy en Argentina ser terrorista es, dicho en palabras simples, todo aquel que no comparta el relato oficial y difunda una opinión diferente.

En este caso… yo perfectamente sería un “terrorista”. Por lo que ¿me pondría a la altura de Bin Laden? ¿Acaso maté a alguien? Si me fuese del país ¿me buscaría la INTERPOL por acciones de terrorismo en Argentina? Queda clarísimo que esta nueva ley no es más que un nuevo recurso del gobierno para callar a los opositores y anestesiar aún más a la gente que los votó, en especial a aquellos que reciben las prebendas del estado.
 
Citando de la Constitución:

            “Art. 14.- Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos conforme a las leyes que reglamenten su ejercicio; a saber: de trabajar y ejercer toda industria lícita; de navegar y comerciar; de peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura previa; de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines útiles; de profesar libremente su culto; de enseñar y aprender.”

Como ya se sabe, es más fácil que Palestina se amigue con Israel, antes que en Argentina se respete la Constitución… por lo tanto, es inútil que se cite un artículo de la misma para defender al individuo.  El espíritu de la Constitución, pensada por Alberdi como bastión máximo para limitar a los gobiernos, ha dado un giro de 180º y es ahora un compendio de palabras simbólicas redactadas en 1853.

 Como conclusión, a partir de hoy me convierto en un “terrorista” para el gobierno de Argentina. Viviré con el miedo de que me multen por decir lo que pienso; con la bronca de no poder vivir libremente y de estar atado a la suerte del día a día; vivir a la expectativa de no saber si tendré que cerrar este blog por no ser oficialista; con la esperanza de tener algún futuro en este país…

Sin más digo ¡BIENVENIDOS A DICTADURA DE LA EX REPUBLICA ARGENTINA!    

viernes, 9 de diciembre de 2011

¡Vos sí! ¡Vos no!

Desde hace mucho tiempo es que tengo el interrogante sobre ¿cuándo se inventó el pasaporte? Y, más importante aún, ¿por qué, hoy en día, es lo primero que hay que tener si se quiere pasar de un país a otro?
 Citando:
            “En la última parte del siglo XIX y hasta la Primera Guerra Mundial, en general, no se requería pasaporte para  los viajes dentro de Europa, y el cruce de la frontera era fácil. En consecuencia, relativamente pocas personas  tenían pasaportes.” ¹

Primero y antes que nada, queda claro entonces que el pasaporte es un invento del último siglo para restringir las libertades individuales, trabando la posibilidad de los ciudadanos para salir de su país y, a la vez, dejar entrar al mismo a los extranjeros.

Ahora bien, ¿quién es el mayor beneficiado? Como no podía faltar, el Estado. En principio porque es el que decide quien entra y quien sale. Segundo, porque tiene el monopolio para  hacer el trámite con el correspondiente costo a cargo de los ciudadanos.

Uno de los argumentos en los que me baso para intentar abrir los ojos sobre este estúpido invento es el porque solicitar a los viajantes el pasaporte para entrar al país…¿Acaso los  viajeros internacionales vienen al país a insultar a los habitantes? ¿A asesinarlos? ¿A robar? NO! Claro que NO! Ellos vienen, justamente, a  hacer turismo, a trabajar, a ejercer toda actividad licita, a estudiar, a conocer lo popularmente llamado  “cultura” y por, añadidura, a dejar sus capitales en el país y aportar su mano de obra. Así ha sido siempre en la historia de la humanidad, hasta que los gobiernos decidieron hacer más difícil, cuando no imposible, ese movimiento espontáneo de la gente.
                           
Un poco de historia (no tan lejana): mi familia es de ascendencia italiana, llegados a  la Argentina junto con otros miles de inmigrantes (italianos, españoles, polacos, etc.), queriendo obtener en estas tierras un futuro mejor del que podían llegar a tener en sus países de origen. ¿Qué hubiese pasado si todos esos miles de inmigrantes hubiesen tenido que tener el bendito pasaporte para venir a la Argentina a vivir? Lo seguro es que más de la mitad de ellos, finalmente, no hubiesen llegado a estas tierras y nuestro país, tal vez, no sería lo que es hoy en día gracias al aporte multicultural de tantos inmigrantes.

Como conclusión, sostengo que el pasaporte no es más que un impedimento estatal a la libre circulación de las personas alrededor del mundo y que cualquier pasaporte (o lo que fuere parecido a ellos), debería ser eliminado, anulado y extinguido de los requisitos exigibles a todo viajero internacional.